La Forja del “Ser”
Somos herreros de nuestra propia existencia. Cada pensamiento es un martillo que da forma al yunque de nuestra alma. La frase “Somos lo que pensamos, cuida lo que piensas es lo que te define” es un axioma que la filosofía ha ponderado por siglos.
Nuestros pensamientos no son meros espectros mentales, sino semillas que germinan en acciones y realidades. Si cultivamos pensamientos de miedo, la ansiedad será la cosecha. Si sembramos semillas de amor, la compasión florecerá.
La mente es un jardín, y nosotros somos sus jardineros. Podemos elegir qué pensamientos nutrir y cuáles arrancar de raíz. Al igual que un jardinero selecciona cuidadosamente las semillas, nosotros debemos seleccionar nuestros pensamientos con intención.
La filosofía estoica nos enseña a aceptar lo que está fuera de nuestro control y a concentrarnos en lo que podemos cambiar: nuestros pensamientos. Epicteto decía: “No son las cosas en sí las que nos perturban, sino los juicios que hacemos de ellas”.
En última instancia, somos los arquitectos de nuestra propia experiencia. Al comprender el poder de nuestros pensamientos, podemos diseñar una vida que sea coherente con nuestros valores y aspiraciones más profundas. ¿Qué tipo de vida estás construyendo?
¿Eres consciente del poder de tus pensamientos? Recuerda, lo que piensas se manifiesta. ¿Qué cambios quieres ver en tu vida?
© copyrigth | José Luis Vaquero
Hay personas que no piensan lo que van a decir y no saben que pueden ofender a muchas personas. A mí me sucedió con un amigo de la niñez que comenzamos una relación. No sabe que me estaba hiriendo mentalmente; pero tuve una pequeña conversación y se lo hice ver. Ésto puede dañar mucho los sentimientos de una persona y también la amistad.
Suelo pensar en positivo,pero a veces tienes bajones emocionales aunque intentes disimularlos,es inevitable tener algún día regular.