A veces nos dejamos de llevar de un momento, de euforia, o de rabia, de ira, de alegría o de precipitación y después lo lamentamos profundamente, no solo por las consecuencias que nos pueda aportar si no también el modo en que les puede influenciar a nuestro entorno más querido, más cercano.
Decidir desde las emociones o en estados emocionales alterados, puede conllevar equivocarnos con mas facilidad al estar fuera de control.
Hay un dicho muy viejo que dice “la venganza se sirve en plato frio” que no es otra cosa que pensada, calculada y estudiada. Para la toma de decisiones es también un buen principio y aun mas cuando son importantes, para nuestro trabajo o para nuestras relaciones de amistad, familia o aún más importante sentimentales.
Por eso no cometas el error de tomar decisiones permanentes, por culpa de emociones temporales.
© copyright | José Luis Vaquero
Tengo un pronto malísimo,cinco minutos en los que me caldeo y soy capaz de decir cualquier cosa,eso unido a que soy muy impulsiva me hizo en su momento quedarme sola en esos momentos de rabia,relajarme,pensar las cosas con tranquilidad y buscar una solución en frío,para poder tomar decisiones acertadas y que las emociones no me jueguen una mala pasada