Un día la mentira le dijo a la verdad…
No quiero que te rindas porque siempre habrá una forma de escapar de sus letras, para no quedarte atrapada en sus versos, en sus conceptos, esos en los que no quieres pensar porque el zapato te aprieta, te enfrenta contigo misma y ni pensar en otra cosa te deja.
Vamos, dejemos atrás esos renglones torcidos que te mantienen presa y escribamos nuestra propia historia desde la libertad del pensamiento, de nuestras propias letras.
Cuidado a la mentira no le gusta ver su nombre escrito, no la interesa.
Creado por: Jose Luis Vaquero.