Hoy que ya no estas
que la vida decidió
de nuevo por ti
sin poderte despedir
hasta no se sabe donde
te quiero decir…
Desde que me sentiste dentro
apostaste por mí…
Pudiste elegir darme la vida
o hacer la tuya y seguir….
Pero cargaste conmigo
desde ese instante
hasta hacerme vivir
y a pesar del dolor
que te causo traerme
a este mundo,
tu ternura la percibí…
Desde mi primer aliento te sentí,
te siento y te llevo dentro,
cada día de mi existencia
pues formas parte de lo que soy,
de lo que seré, de lo que fui….
Todo lo que soy como ser humano,
como hombre como el niño que fui
te lo debo a ti…
Mama…
Gracias por mi existir.
© copyrigth | José Luis Vaquero