“Aun estando ausente, eres esa parte de mí, que se quedó en mi presente…”
REFLEXIÓN
Aun estando ausente, eres esa parte de mí, que se quedó en mi presente. La frase encierra una verdad profunda sobre el amor y las relaciones. A veces, la distancia física no es suficiente para separar los corazones. Las personas que amamos dejan una huella imborrable en nosotros, una huella que persiste incluso cuando están lejos.
Y es que la ausencia puede ser compleja, dolorosa, pero también puede ser una oportunidad para reflexionar sobre la importancia de las personas en nuestra vida. Los recuerdos, las experiencias compartidas y los sentimientos que hemos vivido se convierten en una parte integral de nosotros mismos.
Cuando alguien que amamos se va, una parte de nosotros se va con ellos. Sin embargo, esa parte no desaparece por completo porque tambien nos quedamos con parte suya. Y… Se queda con nosotros en forma de recuerdos, de sueños y de esperanzas.
La ausencia nos enseña a valorar lo que tenemos y a apreciar los momentos que compartimos con nuestros seres más cercanos, más queridos. Nos hace más fuertes y más resilientes. Nos recuerda que el amor puede trascender ir más allá de cualquier distancia.
Pero hay otras formas de ver la misma historia…
Enfocándose en la pérdida
Pero también una ausencia que no se recupera, una ruptura, una desgracia, una muerte, todo puede que termine en algun momento pero de alguna forma todo tambien se queda… Solo es un apunte para que puedas ver el contenido de diversas maneras, desde el desamor, la nostalgia de un adiós, desde la despedida de un ser querido cuando su camino llegó a su fin…
Enfocándose en la transformación
Pero también una ausencia que nos transforma, una ruptura que nos obliga a reinventarnos, una desgracia que nos enseña a valorar lo que tenemos. Todo parece terminar en algún momento, pero de alguna forma, todo también se queda, moldeando nuestra historia. Es un apunte para reflexionar sobre los cambios que experimentamos a raíz de pérdidas significativas, desde el desamor hasta la muerte de un ser querido.
Enfocándose en la memoria
Pero también una ausencia que se convierte en un recuerdo, una ruptura que se transforma en una lección, una desgracia que se convierte en una fuerza impulsora. Todo parece terminar en algún momento, pero de alguna forma, todo también se queda en nuestra memoria. Es un apunte para reflexionar sobre la importancia de los recuerdos y cómo estos nos acompañan a lo largo de la vida
© copyrigth: Jose Luis Vaquero