No es una venganza es solo una forma de cuidarme.
Quizás no lo puedas entender, pero para mí, perdonar a las personas y elegir el silencio al no volver a hablarles no es una venganza.
Es simplemente una forma de cuidarme, de quererme, de valorarme, de no permitir que ese ser se apodere de mi calma, de mi equilibrio, de mi mente.
REFLEXIÓN:
“No es una venganza es solo una forma de cuidarme”. Perdonar a las personas y optar por el silencio en lugar de mantener contacto con ellas no es un acto de venganza, sino de autocuidado.
Al hacerlo, se establece un límite que protege la paz interior y el bienestar emocional. Esta decisión refleja un profundo amor propio y una valoración de uno mismo, al no permitir que personas tóxicas afecten la calma y el equilibrio mental.
Es un acto de liberación personal, donde el perdón no implica reconciliación, sino una forma de soltar el resentimiento y avanzar hacia una vida más saludable y serena.
En esencia, elegir el silencio es una manera de preservar la propia integridad y mantener la armonía interna para que sufra el menor daño posible.
© copyright | José Luis Vaquero
Perdonar a alguien no significa tener que volver a dejar que te haga daño
Mantenerle alejado de ti es una forma de valorarte y quererte como no lo hizo esa persona.