Pero nunca te pedí que fueras mi luna,
ni que fueras mi sol,
me conformaba con que…
fueras la mano que mueven la cuna
de mis sueños, sueños de libertad
rotos en el tiempo que gritan
como lamento al son de tu canción,
aquella que cantabas
a cada momento por camarón…
Y se rompe el silencio con mi voz,
con mi pensamiento,
al ver como el tiempo
se llenó de tus ausencias
de las carencias de tu voz,
de tus silencios…
© copyrigth | José Luis Vaquero
Por amor me entregué…
Entregué todo lo que soy,lo que tengo,lo que siento…
No sé amar de otra forma que no sea entregándome sin reservas