No quiero volver a empezar, dejo atrás el camino y mis pasos me llevarán a otro lugar donde podré comenzar de nuevo sin tener que mirar atrás.
Hay un momento en la vida de cada persona que esta obligado a tomar decisiones complejas, duras, para los demás y para si mismo en las que nos embarcamos poniendo todo en peligro, la autoestima, el equilibro personal e incluso nuestra propia economía.
Es un momento sin duda en el que nos hacemos daño a nosotros mismos y a los demás, a esas personas que nos rodean que forman parte de nuestra vida habitual, no solo nuestra pareja, si no también los hijos y los familiares en general.
Pero es una decisión propia y afecta a quien afecte también te afecta a ti y hay situaciones en las que a pesar del daño y el dolor que podamos provocar es el momento de salir y de no mirar atrás para poder ser coherentes y fieles a nosotros mismos.
Toma la decisión que tengas que tomar, causando el menor daño posible, pero si ha llegado el momento… hazlo y no mires atrás.
© copyright | Jose Luis Vaquero
Sin duda,tuve que tomar la decisión más difícil de mi vida para poder seguir viviendo…
Intenté hacer el menor daño posible, pero es inevitable que me lo hice a mi,a mi chico y a mi hija, porque me vieron sufrir como nunca,pero si no hubiera tomado esa decisión,se hubiera visto implicada mi relación de pareja,mi hogar y mi hija y por ahí no estaba dispuesta a pasar.
Dejé atrás lo que tuve que dejar y hoy vivimos tranquilos y felices.